En la semana 38 del embarazo, el gran momento de conocer a tu bebé está cada vez más cerca. Piensa en la semana 3 del embarazo, cuando tu bebé recién empezaba a formarse y posiblemente tú ni sabías que estabas embarazada.
Pues ahora tu bebé ya está totalmente formado y sus órganos son funcionales; es decir, está listo para poder enfrentar el exterior.
Para ti también ha sido un largo proceso, con cambios físicos y emocionales que te estuvieron preparando. Sin dudas, has generado una relación más cercana con tu cuerpo y lo entiendes cada vez más. Entonces, ahora es momento de escucharlo, pues te indicará cuando el momento del nacimiento llegue.
H2: Importancia de escuchar a tu cuerpo en la semana 38 del embarazo
Desde la semana 37 del embarazo, tu bebé ya está listo para salir al mundo. Por ello, en cualquier momento puede nacer y tú debes estar preparada. La clave está en escuchar a tu cuerpo y sus síntomas. Teniéndolos presentes podrás saber cuándo haya llegado el tiempo del parto (Donaldson, 2024).
Es posible que ahora más que nunca seas consciente de lo que significa el estrés en el embarazo. El suspenso de no saber exactamente cuándo nacerá tu bebé y los síntomas que tienes pueden ponerte en este estado. Sin embargo, debes tranquilizarte y concentrarte en entender los cambios de tu cuerpo y tus síntomas.
En la semana 38 del embarazo, posiblemente continúas con signos que ya son conocidos para ti, pero pueden variar en intensidad o aparecer nuevos. Aquí es donde debe aparecer tu capacidad de análisis para saber si indican que el parto se avecina o no (Donaldson, 2024).
Por ejemplo, hay síntomas que parecen inespecíficos en la semana 38 del embarazo, pero indican que tu cuerpo se prepara para el parto. El aumento en la acidez estomacal, la diarrea y el cansancio excesivo pueden ser señales (The Bump Editors, 2024).
Tu cuerpo necesita acomodarse y que descanses para que estés lista. Si bien es posible que sigas con insomnio en el embarazo, debes intentar relajarte y encontrar formas de conciliar el sueño (Medline Plus, 2024).
H2: El inicio del trabajo de parto en la semana 38 del embarazo
Hay signos específicos que suceden al acercarte al parto y te permitirán saber cuándo va a nacer tu bebé. Encuéntralos a continuación (Mayo Clinic, 2022; Healthy Children, 2022):
- Aumento en la secreción vaginal: durante el embarazo, tu cuerpo generó un tapón de moco para proteger el cuello del útero. Ahora, empieza a expulsarse, generando un flujo espeso con manchas de sangre. En la semana 38 del embarazo, esto indica que el parto está a unos días de ocurrir. Recuerda que solo debe ser un poco de sangre. Si el sangrado es excesivo, debes acudir inmediatamente a tu médico.
- Contracciones de parto: es posible que ya hayas sentido contracciones falsas desde hace varias semanas. Ahora lo importante es identificar las que son reales. Sus características son las siguientes:
- Son regulares y su frecuencia va en aumento. Generalmente, ocurren de 2 a 5 minutos.
- Duran entre 60 y 90 segundos, durante varias horas.
- No se detienen a pesar de que cambies de posición o descanses.
- Son muy intensas y se van volviendo cada vez más intensas.
- Hacen que todo el abdomen se ponga duro.
- El dolor fuerte se siente en la parte baja del abdomen y puede irradiarse a la espalda baja.
- Rotura de membranas o rotura de fuente: el saco lleno de líquido amniótico donde estaba tu bebé debe romperse para que nazca. Cuando esto sucede, puedes sentir un goteo o un chorro evidente de líquido por la vagina.
H2: Lo que no debes olvidar
A pesar de que en la semana 38 del embarazo estás llena de incertidumbre por la llegada inminente de tu bebé, no debes agobiarte. Has hecho todo bien y este tiempo te sirvió para preparar el momento del nacimiento. Tu bebé está listo, tu cuerpo está listo y sabes todo lo necesario para que el parto sea excelente.
Continúa acudiendo a los controles médicos programados y, si no estás segura de algo, no dudes en preguntar al profesional de la salud. Recuerda que tú eres la que sientes y sabes interpretar tu cuerpo. El médico será tu aliado para verificar que todo esté en orden y que tu bebé llegará sin complicaciones.